ISABEL LA CATÓLICA Y SU TIEMPO
Primeramente, antes de comenzar
la reseña desearía das las razonas por las cuales me he decantado por dicho
libro. Una vez escogido el tema me adentré en la infinidad de libros que podemos encontrar sobre Isabel I de Castilla
y entre ese sin fin de bibliografía me encontré con este libro que no solo se
centra en su figura sino también en su época. Desde mi modesto punto de vista
siempre he sostenido que no se puede saber cómo era un personaje y adentrarte
en él sin saber como era su época tanto si se trata de un personaje histórico
como si es uno de los grandes escritores. Éste es uno de los motivos que me
incentivaron para la elección del libro el otro es el hecho de que me es
conocido el ascenso al trono de Castilla por parte de Isabel y sostengo que es
imprescindible conocer su tiempo para entender todo lo que lucho en un mundo
que no estaba hecho a su medida. Sin duda alguna fue una mujer adelantada a su
tiempo que supo jugar bien sus cartas y el destino le ayudó a ello, todo por
ser reina. Esto es lo que me fascina de su persona, el como a pesar de las
dificultades luchó por el trono hasta el final y como fue una gran reina, con
algunos fallos indiscutibles como la expulsión de los judíos. Una vez expuestas
mis razones sobre la elección del libro y la temática me centraré en la reseña.
Como ya
he citado el libro escogido para realizar la reseña es el titulado “Isabel la Católica y Su Tiempo”
de Mº Isabel del Val Valdivieso catedrática en historia medieval y autora de
numerosos escritos sobre Isabel la
Católica centrándose en su persona y en su época, uno de sus
escritos, a mi parecer más interesantes es “1Isabel la Católica y la Educación ”.
Centrándome en el libro que nos interesa he de afirmar que no se trata de un
libro convencional pues al abrir el libro nos toparemos con la sorpresa de que
se trata de una recopilación de trabajos sobre la reina y su tiempo, la mayoría
de estos estudios provienen del V centenario de la muerte de la reina Isabel.
Primeramente me sorprendió el hecho de que no fuera un libro de historia
convencional y me adentré en su lectura. Cuando nos enfrentamos a un libro con
hechos históricos, demasiados conflictos y fechas, solemos tener el perjuicio
de un aburrimiento asegurado. No es el caso del libro de esta historiadora pues
su narración es sencilla, fácil de entender y por encima de todo amena. Esto
para los amantes de la historia es un pequeño aliciente pero para aquellos que
no lo son tanto se convierte en algo fundamental. Se trata de una prosa liguera
que huye de de la pesadez de los libros teóricos. Centrándonos en el tema
fundamental que trata dicho libro he de argumentar, con pesadez, en su contra.
Desde mi punto de vista se trata de un libro que no cumple a la perfección lo
marcado en el título. Se habla mucho de la Castilla de Enrique y poco enlaza con el
personaje de Isabel. Personalmente a este escrito pondría por título “El tiempo
de Isabel la Católica ”
pues poco se habla de ella. Si nos
atenemos al índice podemos apreciar como primeramente se nos habla de la 2Castilla de Enrique. . Éste
primer bloque me parece más que interesante pues se puede apreciar los
problemas a los que se tuvo que afrontar y como los resolvió. Dentro de dicho
bloque no me parece nada relevante dos de los puntos que
allí se encuentran, el primero de
ellos es el capítulo que hace referencia a 3
Pedro Girón y el segundo, el tema que concierne a 4Asturias durante el
principado de Isabel. Los problemas de Castilla eran muchos y estos temas
despistan un poco al apreciado lector pues el orden cronológico se respeta
dentro de cada tema pero no en su conjunto. Tengo que argumentar a favor de
este bloque en relación a los problemas que existían en Castilla, pues estos
problemas y los heredará Isabel al subir al trono tras la Guerra de Sucesión con su
sobrina Juana. Sin lugar a dudas el bloque que más me ha gustado y me ha
parecido más acorde con el título es el segundo bloque titulado 5“Una sucesión difícil”.
Aquí se plantean los diferentes conflictos que se encontraron para saber cual
era el futuro de Castilla tras la muerte de Enrique. En una época donde la
sucesión no estaba muy clara el hecho de que su único hijo fuera mujer y que se
dudara si realmente era su hija ponía el trono en manos de nadie. Este punto me
recuerda inevitablemente a la saga de novelas actuales “Juego de Tronos” pero
lo que ocurrió no es ficción, sino realidad y no deja de fascinarme. En dicho
bloque la presencia de Isabel se nota más que nunca en dicho libro pues es la
gran protagonista, la que firma lo Pactos de Guisando y la que tras la muerte
de su hermano y tras mucho sufrir decide autoproclamarse reina y jugar bien sus
cartas en la guerra que se avecinaba. En el tercer bloque encontramos unos
temas un tanto descolocados y que una vez más no hacen honor a su título.
Personalmente es el bloque que menos me ha gustado pues a pesar de llamarse 6“Algunos aspectos sobre el
reinado de Isabel la Católica ”
poco se redacta sobre ello. Mª Isabel del Val se pierde en un Fernando El
Católico presentado como el príncipe ejemplar en las crónicas de Palencia y
sólo nos habla de la política exterior al final del bloque. El último bloque
nos habla sobre la sociedad castellana de finales del siglo XV. Me sabe a poco
este último bloque a pesar de que la descripción que hace de la nobleza
castellana y todo aquello que les rodea es implacable. Vuelve al reinado de
Enrique, una vuelta atrás en el tiempo que hace que para aquella persona que
quiera indagar en la historia de Castilla y de Isabel se pierda constantemente.
A pesar de que se esté hablando de la sociedad castellana durante toda la obra
es en éste último bloque el que cierra con “su tiempo”.
A modo de conclusión, desde mi
punto de vista dicho libro va dirigido a aquellas personas cuyas nociones de
historia sobre Isabel y la
Castilla de Enrique sean medias. Se trata de un libro
recomendado para aprender. Como ya he comentado esta obra cuenta con sus pros y
sus contras y en general me ha dejado un mal sabor de boca, quizá mis
expectativas fueran altas, pero indiscutiblemente me he quedado con ganas de
más.